[Emily] Ethan x Inquietud x Un pasado tormentoso

Desperté inquieta, angustiada, molesta, demasiados sentimientos atrapados en un corazón tan pequeño. Me senté en la cama y refregué mis ojos, miré a mi alrededor, todo estaba como siempre o al menos eso parecía. Pero dentro de mi mente nada era normal, debido a mi brusco despertar las imagenes de aquel sueño se iban desvaneciendo, pero no así la sensación de ahogo que me había provocado. Solo una idea podía rescatar, algo que ya había asumido hace mucho, Ethan asesinó a mis padres y era esa verdad la que no me permitía vivir tranquila.

- James!!- dije en voz alta sin haber abandonado la cama.- ¿ donde está mi desayuno?

Estaba de mal humor, no podía evitarlo, algunas imagenes del sueño se filtraban en mi cabeza. Imagenes que se mezclaban con recuerdos que creía haber olvidado. Quizás hubiese sido más facil morir yo también, aunque la idea en si no me parecía agradable pues fuera como fuera amaba mi vida y el incidente con mis padres era lo unico caotico en ella.

- James porque te demoras tanto?- dije levantandome y dejando mi habitación- no me digas que te has quedado dormido.

Comenzaba a precuparme pues temía que le hubiera sucedido algo malo.

- Demonios james tenías que demorarte justo hoy- dije claramente enojada mientras me dirigía a mi habitación esperando que él me siguiera- tuve una pesima noche ¿sabes? y cuando me di cuenta de que no estabas me preocupé muchisimo.

Me metí a mi cama haciendo a un lado a mi conejo de felpa negro. Sabía que era mi culpa por ponerme paranoica pero es que tenía que descargar mi frustración en alguien. No pude evitar sonar más autoritaria que de costumbre.

- Quedate conmigo hasta que termine.- un largo silencio se formó entre nosotros.- lo siento.

Murmuré bebiendo un poco de leche, no me gustaba que el tuviera que aguantar todas mis rabias y mis niñerias, pero no tenía nadie más a quien acudir. Extendí mi mano para tomar la suya y la llevé a mi mejilla.

- Perdoname, se que das lo mejor de ti para que yo esté bien atendida. Pero tuve una pesadilla, creo que fue de cuando ethan estuvo aquí por ultima vez- agaché la cabeza y solté su mano.- eres la unica familia que me queda realmente, si algo te pasara yo no creo que podría seguir adelante.

Aquel gesto siempre me tranquilizaba, cuando acariciaban mi cabello me sentia como una cachorrita adormecida y domada.

- Fue la persona con la que más tiempo pasé despues de ti claro. Debo admitir que le tenía incluso más cariño que a mis padres, después de todo ellos tenían que viajar demasiado. El era menor que yo ahora cuando hizo lo que hizo y aún así... Crees que eso se lleva en los genes?

Sacudí la cabeza para olvidarme de todo aquello, asentí frente a la recomendación de mi tutor, aunque mi estomago se negó a recibir mucha comida. Finalmente decidí ir a darme una ducha, eso de seguro me relajaría lo suficiente.

Bajé las escaleras con muchisima lentitud, llevaba un vestido violeta algo ceñido que me llegaba un poco más abajo de las rodillas. Era mi favorito por sus detalles y por lo comodo que era cuando quería salir a pasear.

- me pregunto que deberia hacer ahora...

Te aseas y vistes, piensas en dar un paseo, estas dispuesta a salir, cuando pasas por la recepcion, James aparece y te pide por favor que lo sigas, una vez en la recepcion, observas un sujeto, quien al verte, rapidamente se levanta del sillon en el cual estaba.




Una vez frente a ti, te saluda con una reverencia

*Saludos señorita Emily, mi nombres es Hans, Hans Mordekai, un gusto conocerla, lamento molestarla a estas horas y si interrumpo algo importante, pero debemos hablar, dispongo de vuestro tiempo?*

Seguí a James hasta encontrarme con aquel desconocido. Al principio me mostré deconfiada pero al ver que se presentaba de manera tan cordial y pensando que mi mayordomo no dejaría entrar a nadie peligroso decidi relajarme un poco.

- Muy buenos días, veo que ya me conoce así que no necesito presentarme- hice la reverencia correspondiente regalandole una amable sonrisa- puede tomar todo el tiempo que considere necesario.

Tomé asiento cruzandome de piernas, mis ojos demostrabanla curiosidad que me invadía, aunque dentro de mi siguiera paranoica por aquel sueño que seguía intentando olvidar.

- Y digame, que es lo que lo trae a mi hogar? realmente me parece que se encuentra muy preocupado..

Escuché sus palabras, las cuales inmediatamente me sacaron de mis propios pensamientos. La idea sonaba bastante bien, pues no solo protegía al medio ambiente si no que además debía traer muchos beneficios a los habitantes de aquel lugar.

- La verdad tendría que pensarlo- dije acomodandome, el dinero no era un real problema para mi. Aquello solo era para parecer más seria, puesto que la verdad se me subestimaba bastante por mi edad y con justa razón, después de todo yo no llevaba las cuentas en mi casa.- Como idea suena muy bien y no sería un problema participar, dando los fondos que sean necesarios. Aunque me gustaría que me enviaran mayores detalles, no quisiera que nadie resultara perjudicado por esto.

Le parecía una empresa confiable aunque personalmente no había tenido la oportunidad de conocer al dueño. Miró a James buscando en él alguna señal de si lo que hacía era correcto o no. Le parecía increible que después de tanto tiempo siguiera siendo igual de insegura cuando se trataba de asuntos de negocios.

- Digale al señor Markais que cuenta con mi apoyo con la condición que ya dije y en cuanto a los fondos, eso ya se verá cuando tenga mayores detalles. No quisiera ser egoista claro que no pero procuro manejar responsablemente las finanzas de mi familia.

- El placer fue mio por haber sido tomada en cuenta en este proyecto- dije reverenciando nuevamente despidiendolo con una bonita sonrisa.- James porque dejas que me haga cargo de estas cosas sabes que no soy buena cuando se habla de negocios. Tu eres mucho mejor que yo manejando el dinero, si no mis padres no te hubieran dejado a cargo de todo.

Me puse de pie y arreglé mi vestido, me iría a entrenar un poco. Algunos ejercicios simples que me mantuvieran activa y ocupada serían más que suficiente.

- Crees que hice bien James? realmente me cuesta mucho confiar en mis decisiones en este ambito en especial porque siento que ese dinero no me pertenece.

- O pero que oportuno- dije agradeciendole al empleado con una sonrisa- será mejor que vaya por mi traje de baño, por si es que ocurre algun percance o me da calor.

Corrí escaleras arriba y en menos de quince minutos ya estaba abandonando la mansión rumbo a mi yate. Con lujos así era muy facil olvidarse de las cosas malas que me habían sucedido.

- James preparame una merienda por si me da hambre durante mi paseo.- dije con seguridad y salí de allí una vez todo estuvo listo.

Mi yate era precioso, de color marfil y su nombre era Suspiro, el nombre se lo había puesto yo simplemente porque sonaba bonito.

El viento en mi rostro me hacía sentir completamente libre, mi mirada estaba perdida en el agua, pero decidí salir de cubierta un momento. Fue entonces cuando el piloto se me acercó al parecer había una columna de humo a lo lejos.

- Me pregunto que habrá pasado- dije con seriedad luego de pedirle que se acercará, tratando de adivinar que estaba sucediendo- espero que no haya nadie herido.

El miembro 'Emily' ha efectuado la acción siguiente: Dados

'1d20' :

-acercate, quizas alguien necesita nuestra ayuda- dije con voz firme. Aún cuando no lograba distinguir absolutamente nada por más que forzara la vista, sabía que algo debía estar pasando.- oye no tendrán unos binoculares por ahí?

pregunté volteando ligeramente dejando de prestarle atención por un momento al alboroto que estaba más adelante.

- Rapido hay que hacer algo- dije con total seguridad moviendo a mis hombres- No se queden allí vayan a ver si hay algo que pueda hacerse.

Sin esperar que los demás reaccionaran me despojo de mi vestido, el cual cae al suelo con todos sus lazos dejandome unicamente con mi bikini. Me lanzo al agua nadando para acercarme al bote y averiguar si queda alguien con vida, alguien a quien no haya notado.